lunes, 21 de junio de 2010


SOBRE LA ESCRITURA Y LO FILOSOFADO


No es fácil, desde el pensamiento medico, positivista, abordar el tema de la literatura. Sin fruncir el seño y quedar durante mucho tiempo con una sensación de angustia y confusión. “Existe una literatura médica”, científica, que pretende guiar al médico en su praxis. Indudablemente lejana a la concepción de la literatura como arte.

Sería difícil concebir al último número de los Anales de Medicina Interna Española como una obra de arte, digna de una valoración crítica literaria y además de incluirla en el canon literario actual. Pero sigue siendo literatura médica. Por ejemplo la Semiología Medica se sirve de la observación de signos y síntomas, que son agrupados en síndromes. Posteriormente, al asociar estos síndromes con exámenes paraclínicos, se obtiene una entidad nosológica específica.

El autor o los autores de los artículos o tratados médicos son en su mayoría médicos. No hay discusión alguna sobre la valides de lo que allí se escribe en tanto se supone debe estar basado en la aplicación del riguroso método científico, al mejor estilo Popperiano. El pensamiento medico se ha mantenido invariable desde hace mas de 2500 años, tanto en la cultura occidental como oriental, cada una con sus peculiaridades. La medicina occidental no ha sufrido los avatares del cambio entre lo moderno y lo postmoderno. No existe una literatura médica moderna o postmoderna.

Nadie ha afirmado que la literatura médica a muerto o se ha transformado como lo hizo Alvin Kerman, tampoco han existido corrientes filosóficas que hayan influido de manera drástica en el pensamiento medico y por lo tanto en su literatura. Como es lógico, para un medico lo esencial es la evidencia, es decir, la sustancia. La descripción detallada de cada signo y síntoma conlleva horas de observación y comparación. El médico transcribe en forma estricta lo que observa, percibe. Es complicado hablar del mundo de las representaciones en la medicina, igualmente de idealismo, materialismo o racionalismo. Ninguna de estas aproximaciones a lo humano ofrece utilidad a la técnica médica. Nadie ha escrito una aproximación psicológica a la obra de un cirujano o médico internista famoso. A excepción de la psiquiatría pero podemos considerarlo como una redundancia.

Al escribir estas líneas, debo confesar la sensación de basta ignorancia que se siente al hablar de teoría de la literatura y de teoría literaria. La impresión de mezclar lo filosófico con “lo arte”, puede compararse sin ninguna exageración con la más fiel vivencia psicótica. El maestro Alejandro García Malpíca intento introducirnos a una epistemología de la literatura muy sistemáticamente. Haciendo hincapié en la diferencias abismales entre las concepciones filosóficas, políticas y literarias modernas y postmodernas. Reconociéndolas como “aun en desarrollo”. No dejo de manifestar un nihilismo desolador en algunas oportunidades.

Lo moderno fue descrito como verdad, centro y ley. Pensamiento colonial, dominación e imperialismo. El predominio del mundo de las representaciones. Lo postmoderno fue descrito como un caos ordenado, libertario. Lo neo revolucionario que no termina de hacer revolución. La literatura fue tratada como el reflejo de estos cambios, como el Vas Hermeticum donde se podían observar esos movimientos.

La multiplicidad de aproximaciones a la teoría de la literatura: Filosóficas, antropológicas, sociológicas, psicológicas, transdisciplinarias, etc. Complican la posibilidad de una aproximación específica. Habría que escoger a lo sumo un par de ellas, para evitar así enredarse en contradicciones epistemológicas o metateóricas. Por lo menos para alguien que se está iniciando en su estudio.

No es lo mismo ser autor de una obra poética, que escribir crítica literaria. Menos aun que escribir sobre teoría literaria. Desde el formalismo ruso hasta los más postmodernos teóricos literarios han considerado sus posturas como las más acertadas. Diferentes escuelas, diferentes formas de ver al arte. Eso continuara cambiado como lo ha hecho desde platón, quien considero a los poetas como simples imitadores, hasta la máxima elevación del poeta como en María Zambrano.

Conociendo lo más complicado como es la descripción de la esencia del arte, del alma del artista. Como elemento metafísico, motor del ser. El descubrimiento del ser en el poema de Parménides. El constante fluir en Heráclito. El nous Platónico y el Demon en Plotino. Constantes descubrimientos ontológicos que se han dado a través del arte, de la poesía.

La primera aproximación descriptiva funcional de la poesía, tragedia o sátira como lo fue la poética de Aristóteles. Toda la fusión entre el platonismo y los primeros cristianos como en los textos Gnósticos. Escritos en una prosa encriptada, sublime. El sincretismo entre la mitología griega/ romana y lo judío/cristiano. San Agustín, la reinterpretación de lo Aristotélico por Santo Tomas de Aquino, una aproximación Metafísica/teológica de la creación. No solo de la creación divina, también de la creación por el hombre.

La sublimación alquímica en la edad media, que transformo a lo filosófico en el símbolo del opus, de la nueva creación, poesía y grabado alquímico. La misma escritura mística medieval sustentada una vez más en metáforas metafísicas. Las exegesis de San Irineo como búsqueda de un contrato definitivo entre lo cristiano y lo pagano. La creación tradición dada desde lo oral a lo escrito sufre las influencias de cada hombre que logra crear un sistema filosófico. De cada imperio, de cada civilización que desaparece o aparece. De homero hasta hoy nada se ha salvado de eso, de la tragedia humana. Desesperación y abandono han sido la esencia de la escritura en occidente.

Luego un silencio, una pausa, la constricción rompe en lo moderno. En la nueva exegesis de lo que antes era lo formal. El redescubrimiento del hombre de platón, pero que devino en eso de la verdad, el centro y la ley. Los nuevos imperios. Fichte en su “Exposición clara como el sol”, los nuevos diálogos entre autor y lector, lo esencial dado en la experiencia y la representación.

La causalidad en Maine De Biran con su: Opinion de Hume sur la nature et l`origine de notion de causalité. Causa, voluntad, objeto, experiencia. Quizás un resucitar del constante fluir en Heráclito. Al fin Hegel con su: Die Phünomenologie des Geistes, el Idealismo Alemán. “lo verdadero es el todo, pero el todo es la esencia, que no se completa sino por su desarrollo”. Ser, la nada, el devenir; “ex nihilo nihil fit”. La enciclopedia de las ciencias filosóficas, la filosofía para Hegel es la ciencia que nace de la unión entre arte y religión. Hegel es la bisagra ente lo antiguo y lo moderno.

Seguimos en el ideal, en Balmes; con El Criterio:” El pensar bien consiste en conocer la verdad o dirigir el entendimiento por el camino que conduce a ella…, El arte de pensar bien no se aprende tanto con reglas como con modelos”. Y aparece Schelling y con él, System des transzendentalen idealismus: “Solo hay dos caminos para salir de la realidad vulgar: la poesía, que nos trasporta a un mundo ideal, y la filosofía, que hace desvanecerse completamente ante nosotros al mundo real”.

Pero entonces si Hegel es la bisagra, ese punto entre el tronco del árbol y la raíz. No por coincidencia aparece Kierkegaard. Filósofo, Poeta con múltiples seudónimos. Diario Intimo, El Concepto de Ironía, la repetición, Temor y Temblor, El concepto de la Angustia, La enfermedad Mortal, La profunda angustia metafísica, el primer dibujo de la neurosis occidental. El temor a la desaparición del ser aun en vida, la culpa.

Hace presencia para complicarlo todo Comte y “Cours de philosophie positive”: “en effect, dans les quatre catëgories principales de phenomenes naturels énumérées tout á l`heure, les phenomenes astronomiques, physiques, chimiques et physiologiques…”. Paralelamente Shopenhauer, El mundo como voluntad: “una vez convencidos de que la representación como motivo no es una condición necesaria y esencial de la actividad de la voluntad, reconoceremos fácilmente la acción de la voluntad aun en casos en es poco ostensible…”El hombre ahora es responsable de sus actos.

Nacen una nueva serie de filósofos los, Hegelianos. Los que están a favor o en contra, los que lo amplifican o los que lo reducen. Feuerbach escribe en. Fragmente zur charakteristik meines philosophischen entwicklungsganges: “¿Cuál es la relación que hay entre pensamiento y el ser, entre la lógica y la naturaleza?”. También escribe principios fundamentales de la filosofía del porvenir, contra el dualismo de cuerpo y alma, carne y espíritu.

¿Por qué hacer una antología filosófica, si hablamos de literatura? Porque los sistemas filosóficos tuvieron tanta influencia en todas las aéreas de la creación humana, que no solo modificaban lo que se escribía, si no, lo que se entendía de lo escrito.

La lógica, racionalista e inductiva de J. Stuart Mill. Con su “Funcion y valor lógico del silogismo”:

“todo hombre es mortal;
Sócrates es hombre,
Luego
Sócrates es mortal”.

El inicio del racionalismo, del futuro almidonado método científico. El hombre y las ideas como centro del universo, aun sin renunciar a dios, lo divino se expresa en la capacidad del hombre de pensar y crear. Hasta aquí aun a pesar de las filosofías humanistas, el hombre religioso no ha desaparecido. Por eso aun se le escribe adiós, las poesías tiene como tema: dios, el amor y la muerte.

En el siglo XIX irrumpe Darwin con su teoría evolucionista y se desmorona el ala derecha de las tesis sobre el devenir del hombre. Darwin bautiza la nueva era dirigía al hombre estudiado como tal, a la antropología. “El origen del hombre y la selección en relación al sexo”

El desarrollo de la industrialización, las diferencias sociales abismales en la Europa de mitad y finales del siglo XIX, esa sopa de tensiones sociales deriva en la filosofía Marxista, y a partir de entonces el mundo no sería igual. El marxismo se metió en todo: en las escuelas, en el arte, en la poesía, en la antropología, en la psiquiatría etc.

Se asoman por allí: Max Scheler con “el puesto del hombre en el universo”, Spencer con “los primeros principios”, James con “el pragmatismo”. Y entonces la bomba, explota lo humano, dios muere, nos abandona. Nietzsche y “humano, demasiado humano” “Así hablo Zaratrustra”, el origen de la tragedia, la gaya ciencia. Y Nietzsche escribió poesía:

Poesías de Gaya ciencia

38. habla el piadoso
Dios nos ama por que nos creo.
“El hombre creo a dios”, dice el sutil sobre el caso.
¿Y no ha de amar lo que creo?
¿Acaso porque lo creo deberá negarlo?
Eso cojea, gasta la pezuña del diablo.
62. Ecce homo
¡Si, se cual es mi linaje!
Como la llama insaciable,
Ardo y me consumo.
Luz se hace cuanto cojo,
Carbón cuanto abandono
Llama soy, seguro.

Quizás debí comenzar este escrito con la gran pregunta. ¿Qué es la literatura?, así como Heidegger se hizo la pregunta ¿Qué es la metafísica? Heidegger fue astuto, no fue que vacilo en su respuesta. Veamos:

“La pregunta hace concebir la esperanza de que se va hablar acerca de la metafísica. Renunciamos a ello. En su lugar vamos a dilucidar una determinada cuestión metafísica. De este modo nos sumergimos inmediatamente dentro de la metafísica misma”

Así quizás deberíamos hacer con la literatura, escribir, escribir, simplemente escribir y leer, leer.

VIAJE SIN TIEMPO

A: Fragolina

Desperté volteado hacia la ventana. Sobre la mesita de noche una tarjeta escrita en francés que dice: Je t'aime y mi pistola 9mm Beretta, una botella de etiqueta azul vacía y dos líneas de cocaína intactas. No sé si esta amaneciendo o atardeciendo, a lo lejos la silueta iluminada de la torre Eiffel. Estoy desnudo y decido voltear. Sobre la cama aun dormida estaba la prostituta cara. Me volteo y pongo la pistola entre mis piernas.
Horakyo

El ser como paisaje interno en la obra de Hanni Ossott

Al principio todo es un juego, porque a través del juego recreamos el mundo. Reconocemos nuestra realidad usando la imaginación, haciéndola más digerible. La fantasía permite reducir la frustración, regalándole al ser la posibilidad de la sublimación y la postergación. Es decir desde niños podemos engañar de manera muy eficaz a la adversidad del estar vivos, imitando, reelaborando nuestro entorno y a los otros seres con los cuales lo compartimos.

La poesía como creación es una posibilidad gracias a lo niño, a la imaginación como capacidad netamente humana, única e inalienable. Antes de poder pensar el hombre imagina, le hurta a la realidad a través de la representación, es más fácil, más eficaz, pues la aparición del logos anuncia la terrible llegada de la angustia, de la persecución, de la frustración. Por eso alucinamos o tenemos ilusiones.

Quizás a eso se deba que ninguna filosofía haya podido resolver nada humano y el hombre se vea obligado a retornar a la poesía, arrepentido, burlado por la tragedia. Poesía y filosofía han sido terribles amantes, a veces juntas, la mayoría separadas. Se acusan entre sí, se niegan, pero terminan al final unidas por la desesperación y la desesperanza.

Platón rechazaba a los poetas acusándolos de simples imitadores, plagio les gritaba, creación sin fin. Sin embargo no pudo escapar a lo poético, la primera reconciliación entre poesía y filosofía ocurrió en lo platónico. En la esencia del amor entre los hombres, en la inevitable naturaleza del ser, en lo metafísico. Pues la filosofía primera nace en un poema de Parménides, donde emerge glorioso el ser en una obra poética. Que ironía, la respuesta a ese descubrimiento poético es la filosofía occidental, aun la mas actual no escapa de la imago del ser en Parménides.

Lo metafísico no es poético, ni la poesía es metafísica. Sin embargo el acto creativo no obedece a las normas creadas por el logos y permite la filtración de elementos metafísicos a la poesía y viceversa. Entendiendo que es el ser quien crea, quien desea, quien añora, quien recuerda y quien sufre. La aparición de conceptos metafísicos como: lo uno, el otro, lo múltiple, la continuidad, el movimiento, el tiempo, la nada, etc. Validan la intención humana de afirmar la existencia en el mismo acto creativo y por ende en la obra de arte. Además de intentar permitir la disminución o desaparición de la angustia existencial o angustia ontológica.

El presente análisis pretende identificar en la Obra de la poetiza Venezolana Hanni Ossott elementos metafísicos que pretenden describir un paisaje interno, en constante cambio y su conexión con un planteamiento ontológico y poético coherente.

El ser:

Ossott aborda en su obra al ser como algo trascendental, luminoso, en constante movilidad. En Sombra de las sombras:

“Sé que soy y no soy…
Recorro con la vista fija
En un letargo miserable
Concluyo el estudio, su estructura;
Las partes que componen la figura son mías
.
Soy sombra de las sombras…”

Aquí hay una continuidad, donde el ser se reconoce en su potencialidad dual de la existencia o de la no existencia. Ambas se validan, pero se reconocen como una sola estructura que es el ser ella misma, identificándose con lo otro interior y describiéndolo como lo sombriaco. Es oportuno establecer aquí un paralelismo con el poema de Parmenides:

“Aquella que afirma que el ser es
Y él no ser es,
Significa la vía de la persuasión
Puesto que acompaña a la verdad…”

Pero este ser que describe Ossott no es un ser griego, es un ser nutrido con tres mil años de filosofía e historia. Como María Zambrano afirma: “Ya el ser no es independiente de mi, pues que en rigor solo en mi mismo lo encuentro, y las cosas se fundamentan en algo que yo poseo. Solo la persona humana quedara exenta, libre, fundándose a sí misma” (1).

En “Espacios para decir lo mismo” nos encontramos con la descripción de continuidad y movimiento, para la poetiza todo estaría expuesto a cambio y fluir incesante. Al igual que en Heráclito se interpreta que en la lucha de los contrarios esta el movimiento y por lo tanto el cambio. Situación que se hace repetitiva en toda su obra, incluso citando al filósofo en el poema “Grietas”.

Sustancia y esencia son tocados por Ossott, el cuerpo es señalado como una carga, habitáculo, contenedor. Dándole mayor importancia al alma. En el cuerpo se encuentra el dolor, la pesadumbre, la tortura. El alma trasciende a lo corpóreo, en “Lo mudable”:

“Mira como me duelo. El cuerpo es traje reversible, pero aun más allá. Una forma plástica. El cuerpo se modula así, voltea su cobertura, la piel, ese depósito receptor, esa forma amorfa que recibe y contiene, expulsa y aborta”

El ser se reconoce como continuo, contenido, separado de lo exterior y del otro. Es contundente en esto, obsesiva en desarrollar la metáfora del sujeto y el objeto. La otredad es activa, se presenta como esencial en la vida del hombre y en su finalidad. La relación sujeto/objeto a veces se descubre como complicada, invasiva, abrasiva. Aparece como conversación interna, soliloquios reflexivos que dibujan a lo especular.

Ossott revalida poéticamente la preguntas peligrosas, olvidadas, negadas: ¿Qué es el ser?, ¿Qué es la metafísica? No les da respuesta pues no es la función de la poesía, sino que descarga el terrible peso de la angustia producida por la misma pregunta. Y por la respuesta inconclusa hasta para la filosofía.

En el tejido, la red: imbricaciones,
“Crear lapsos y eludir ciclos…

Objeto con objeto. Objeto frente a sujeto. Canto unánime a pesar del caos. La intención que transforma esto que allí esta no es ello sino yo, y yo lo desplazo, organizo sobre él la necesidad. Lo cubro, mi pensar lo modifica. Esto que allí esta es lo otro y su forma insiste en modificar mi intención. Forcejeos. Hasta la próxima aparición de lo plano y lo móvil. Baile continuo entre sujeto y objeto borrándose. Apariciones desapariciones”

Impresionante planteamiento metafísico donde la dualidad pensamiento/sentimiento, percepción/intuición arman un eje existencial, aparentemente lógico que terminan en la fusión entre lo uno y lo otro. Imagen un tanto cercana a la postura psicodinámica de la psicosis, de lo loco, pero también, de lo normal.

El doble, lo siniestro, no solo como simulacro, también en lo real. Caín y Abel, dios y Satanás. En constante conversación, un dialogo productivo que se convierte en poema, en arte. Se obtiene la liberación al final de lo corpóreo, predominado la esencia. La nada, el vacio provienen de lo humano no de lo divino.

En “Un bloque de verdes evidentes”:
“Todavía lo vacuo y lo inánime
El gesto absurdo
Lo disperso
Recorren tu cuerpo.
Toda tu identidad, la especie,
Permite modular la voz de un canto
Escaso, si,
Precario y continuo
Golpe de tambor monótono
Eternidad agregada a un sol idéntico siempre”

Son humanos la tragedia, la enfermedad, la soledad, el dolor, el desasosiego. No se oculta nada para si, Ossott todo se lo revela. En una luz frágil pero continúa. No hay metáfora de la cueva platónica, la sombra no proviene del afuera, del fuego en la entrada de la cueva, sino del ser. Temporal, perseguido por la muerte.

En el breve poema “Vigilia”:
“El mar
En mí
No deja dormir”.
O en “Es Klingt ein Lied in Mir “:
“Los muertos son estrellas
Profundas estrellas enclavadas
Como centros de luz
En el ámbito de la noche que aparece en nosotros
Dolorosa”.

El ser trasciende a la muerte pero no en el sentido teológico, religioso. Trasciende en el simple pero permanente sentido metafísico. La esencia supera a la sustancia.

En la poesía de Ossott aparece lo divino, se dibuja, pero no aparece dios. No es una poesía atea, pero predomina el idealismo, el Nous como motor vital. A ella no le hace falta la escusa judío cristiana de los poetas pasados, ni la negación de lo divino, o religioso de los actuales. Le basta con la primacía de la filosofía primera, del elocuente ser y sus vicisitudes para entender a lo humano. No hay culpa, no hay remordimiento solo existe el entendimiento.
En “Plegarias y penumbras”:
“Rezo
Tengo miedo
Desconozco
No sé moverme
El rio me habla de lo raro
De lo inmenso
Rezo…
Siempre espera algo Osott, una epifanía, una conversión milagrosa. Utiliza todas las imágenes de lo exterior para describir su ser, es un paisaje manipulado para traerlo hacia adentro. Es allí donde aparece lo onírico, la duermevela el estado confuso onírico. El típico desplazamiento y la condensación como mecanismo freudiano del sueño, pero Ossott no está dormida solo escribe poesía. En “Orfeo”:

“Desde el abandono
Te he otorgado poros de poesía, surcos plenos de sudor
Almas, carnes, pelo, cuello, manos…
Me hiere tu canto, Orfeo. Bacante soy de ti…
Orfeo ¿Dónde estás? Socórreme.
Amado”.

El dialogo, el hablar con uno mismo. El método socrático de preguntar y responder, la mayéutica. El reconocimiento del devenir como lo esencial. En Ossot todo tiene advenimiento y la vez no lo tiene. Todo deviene, nada deviene. Al igual que en Platon en Ossott se descubren dos preguntas: ¿Qué es lo que es siempre sin advenimiento? Y ¿qué es lo que siempre está en advenimiento pero nunca está siendo?
En “Del país de la pena”:

¿Quién soy? ¿La luz que ilumina esta verja, esta tierra?
¿Soy los arboles y las plantas? ¿Acaso el mar?...
¿Quién soy yo?...
¿Dime quien soy yo?...
¿Qué soy?...
¿Soy de la edad media?...
¿Quién está allí?...
¿Qué significo?...
¿Entonces?...
¿Qué más?...

El poder, el dominio del el uno sobre lo otro. La ganancia ontológica de saberse ganadora, poseedora de la verdad. Su poesía va madurando. Se hace más segura, más corta. Quizás más eficaz. Contemplarse a uno mismo a través del otro, de sus debilidades valida la existencia de uno mismo. En “la mordida profunda”

“Hay una mordida profunda
Incisiva
En el centro de mi sexo
Por la cual
Yo me erijo como yo misma
Y soy,
Y poseo y dono.
Regalo mi cuerpo y mi ansia
Hay una mordida en mí
Que doblega al otro
Lo arrodilla, lo inclina”.

Ossott se reconoce poeta, ella se avala en su creación. Le otorga campo de trabajo y funciones al poeta. Lo diseca, construyendo la justificación de su arte.
Porque sin finalidad le encuentra objeto al poeta, catarsis, evacuación, liberación, parto, revelación. En “Poesía”:

“Quien vive la poesía vive, la tensión.
El cielo, la tierra, los hombres les resultan extraños…
Al poeta le gusta el abrazo…
¿Qué es ser poeta?
Llorar
Llorar. Infinitamente.

La enfermedad, la locura, el no ser, La alienación, la bipolaridad. De nuevo la lucha de los opuestos, lo anti cartesiano. En el poema “Las pastillas” se reconoce enferma, enferma de vivir. La existencia del ser como carga, lo corpóreo. La alienación provocada por la medicación psiquiátrica. Señalando lógicamente la ignorancia del que supuestamente sabe. El otro que no conoce de ella, perola domina, el médico psiquiatra. Pero al final la libertad:

“la enfermedad es el vivir
La única
La enfermedad es el cuerpo
Y las pastillas no sirven de mucho
Solo sirve el alma
Haciendo cuerpo
Y el cuerpo
Haciendo alma
¡Fuera el Lexotanil!
Ciao bambino”.

Citando a la misma poetiza para finalizar:
“Mis libros han sido mi alma expresándose en si misma…No he fabricado libros para el público. Escribir para mí es conocer, llegar a saber. puesto que no he logrado saber mucho de mí misma, escribo. La escritura es para mí espejo…nunca ha sido para mi intención horrorizar al lector con mis penas. Prefiero hacer pensar. Quiero que mis libros provoquen pensamientos, reflexiones.”

BIBLIOGRAFIA

(1. Filosofía y poesía. María Zambrano, Editorial Fondo de Cultura Economica. Mexico, 1993.
2. Los poemas fueron tomados de Antología Poética de Hanni Ossott de la editorial Monte Ávila. Caracas 2006.

jueves, 18 de marzo de 2010

CONFESION

A Eliézer Melean

Volver a verte era un oscuro presentimiento que tenia de hallarte ajena y sin embargo seguir creyendo que eras mía.
Rafael Maya

Te lo digo
no te miento,
ella todavía hermosa se marcho.
Sus manos ahora libres,
sus pecas irresponsables
vagan sin ti.
Sin nada tuyo.

Te lo digo
no te miento
sin culpa la he visto pasar de la mano del otro.
En cómplice ella a intentado convertirme.

No te miento amigo
incluso la he visto reír,
creo que su vientre ya no es el mismo.

No te miento amigo
ella volvió a nacer.

EXISTIO UNA VEZ UNA PAREJA

En los llantos de amor nos conocemos mas que en todos los besos de la dicha.
Yolanda Bedregal

Existió una vez una pareja,
vaya que pareja.
De sueños irrealizables,
de conflictos permanentes
y de dudas irreconciliables.
Sin embargo el amor orgulloso los acompañaba,
la inocencia sin temor los retaba
y la dicha vestida de encanto saboteaba a diario a su amargura.
Ellos padecían de la necesaria mirada de los otros,
incluso a veces lograban retar a las leyes,
vencer a la cultura
y discutirles a los dioses.
Jamás temieron a los espacios geográficos,
a las llamadas a destiempo ni al destino inoportuno.
Construyeron su castillo en la mar de infantes
y permitieron que los mosquitos sagrados custodiaran su entrada.
Ni se diga de la cama,
de las sabanas errantes,
del sudor despierto
y el goce alucinante.
El hijo prometido jamás llego
pero la imagen necesaria de su retorno hoy los castiga.
El tiempo era manejado a su antojo,
las olas,
la neblina cómplice
y el licor dulce.
Ebrios conducían hacia la pasión,
una vez allí derretían sin dificultad a las críticas mutuas,
a los golpes abstractos.
Parece mentira tanta ignominia,
tanto descaro,
tanta dialéctica humillada.
La lógica mas temprano que tarde venció a sus aspiraciones.
La burda maldad conquisto a sus almas
y le otorgo paso a la soledad.
Hoy ausentes,
Separados,
ya no cómplices,
orbitan independientes en sus propios universos.

Hoy ellos ya no son….

lunes, 25 de enero de 2010

GIGAS

Te he pensado
en las tardes acorazadas del Macapo venenoso
esperando el paso de los mozquitos impertinentes.
Por que para algo debe servir la memoria
y estos 16 gigas de fotos.
A veces me pregunto
¿ donde estas?
¿ en un parís soñoliento?
¿en una caracas clínica?
¿en un curiepe sin turistas?
Prefiero olvidar antes que descubrirte de otro,
tal vez el delirar sea mas sano
y convenserme que jamas habrán
mas consultorios encantados.